Decoración con almohadones
Para los fanáticos de los detalles, la decoración con almohadones es una
debilidad. Inundamos el sofá, las sillas y las camas con ellos pero, ¿hasta qué punto quedan bien? Descubre estas reglas generales para usar almohadones y renovar los ambientes de tu hogar.
Para la sala
• ¿Pares o impares? Si quieres darle aires modernos a tu sala, rompe la simetría. Elige un número impar de cojines (3 o 5) de tamaños distintos. Si, en cambio, tu hogar conserva una línea de decoración tradicional, acomoda en los sillones dos o cuatro almohadones grandes en forma simétrica.
•Empieza una colección. Para darle un tinte personal a ese sillón blanco, llénalo de almohadones de los lugares a los que viajes. De esa forma, conseguirás tener distintas texturas, estampados y colores. Cuidado: una mezcla tan variada funcionará siempre que haya una mínima armonía entre las piezas, como la gama de colores, por ejemplo.
• Juega con las formas. ¿Por qué todos los almohadones deben ser cuadrados? Innova con algunos redondeados, alargados o circulares para un efecto visual sorprendente. A veces, un solo cojín XXL basta para redecorar un ambiente.
• Una paleta natural. Si las paredes y muebles de tu sala tienden a los tonos amarronados y beige, un puñado de almohadones verdes, amarillos y marrones iluminarán el lugar de una forma alegre y natural.
• Estampados personalizados, para un look ecléctico. Si estás cansado de comprar siempre los mismos cojines, créalos a partir de fotos de tu familia o de tus mascotas. Puedes darle a las imágenes un toque pop-art para un efecto vanguardista.
• La elección de la tela. Opta por almohadones de una paleta limitada y grandes estampados geométricos en telas suaves, como algodón o lino, para un efecto moderno. Si en cambio prefieres un estilo clásico, escoge terciopelo o seda. Combina estampados florales con lisos, para dar una impresión de orden y equilibrio.
Usa almohadones/cojines con telas suaves para lograr un ambiente moderno.
• Considera todo el ambiente en su conjunto.
Los almohadones de una sala son como los miembros de una familia. Cada uno tiene rasgos particulares, pero comparten alguna característica que los une. Ya sea por la paleta o por el estilo, procura que los almohadones de los distintos sillones y de las sillas se vinculen.
Para tu cama
¿Cómo combinarlos para evitar que luzca recargada? Estas reglas se aplican a cualquier cama de tu hogar:
• Todos distintos. No tengas miedo de fusionar estampados y tamaños. Flores y rayas, lunares y diseños geométricos, cuadrados y redondos, ¡todo vale!
• De mayor a menor, de atrás hacia adelante. Coloca los cojines más grandes contra la cabecera de la cama y ordénalos según su estampado; los almohadones blancos y pequeños quedan en primera fila.
Cojines acomodados de mayor a menor. / Foto: Thinkstock
Para los cuartos de tus hijos
• Para los varoncitos. Recrea una escena neón, bien moderna. Si la habitación es blanca, decora la cama con almohadones azules de distintos tamaños y tonos, con detalles en amarillo vibrante.
Los almohadones azules son ideales para la decoración de tu hijo. / Foto: Thinkstock
• Ideal para niñas. Si tienes hijas, decórales el cuarto con almohadones a tono con las cortinas o con el empapelado. Juega con los contrastes: fusiona cojines de colores sólidos con unos de lunares o rayados. ¿Otra buena alternativa? ¡Cojines con frases estampadas!
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